Bueno, el mío, Killerman, es el apodo que me dieron en artes marciales. Basicamente, mis colegas consideran que mis preocupaciones son tres: dinero, sexo y ¡violencia! Dado que mi enfoque era peculiar -por un lado, respeto exagerado por la etiqueta, por el otro, obsesión por la violencia-, bueno, primero fui The Killer, luego The Killerman, y finalmente, Killerman.<br />
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Elegí a Dark Vader por el arma y técnica que emplea -sable laser con esgrima occidental de teatro simulando esgrima japonesa-, algo muy triste... lo que me reí con el combate entre él y Obi Van Kenobi B-DDDD<br />
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Gente enferma, afirmo mismamente.
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